EL BARÇA TOMÓ LA DELANTERA DESDE EL INICIO CON UN GRAN ACIERTO EXTERIOR.
El Gran Canaria se presentaba ante su afición con una camiseta en apoyo a La Palma, que desde el pasado domingo sufre la erupción de un volcán que está causando dolorosos daños materiales.
Los claretianos tenían ante sí un reto mayúsculo con la visita del vigente campeón, un Barça que tras caer en la final de la Supercopa Endesa tuvo que sufrir hasta el final para tumbar el pasado domingo a UCAM Murcia. Los de Jasikevicius salieron dispuestos a evitar despistes y sorpresas. Hayes, con un triple, y Higgins, con tres sin fallo (2-12, minuto 4) forzaban el tiempo muerto de Fisac en apenas tres minutos y medio. El equipo blaugrana no levantaba el pie del acelerador y Niko Mirotic se sumaba a la fiesta. Sin embargo, la escuadra amarilla, aupada por un gran Chris Kramer, firmaba un parcial de 10-0 para acercarse en el luminoso antes del término del primero (17-23).
El ritmo anotador del primer acto se diluyó en el arranque del segundo. En los tres primeros minutos, apenas se contabilizó una canasta en la pintura de Brandon Davies. Ambos equipos intentaban sumar desde el exterior, pero los aros parecían cerrarse. No se le cerró, eso sí, a Kyle Kuric. El examarillo transformó dos triples seguidos (20-31, minuto 15) para hacer que la renta culé volviera a ser de dobles dígitos. Los visitantes siguieron haciendo un buen trabajo secando el ataque isleño, y consiguieron encarar el túnel de vestuarios con una ventaja superior a la decena (26-41).
SIN OPCIONES
AJ Slaughter anotaba de tres la primera canasta tras el paso por vestuarios, pero el Barça volvía a marcar rápidamente territorio. Si bien el equipo de Porfi Fisac no le perdía la cara al choque, llegando a situarse ocho puntos (35-43, minuto 25), los vigentes campeones encontraban diferentes fuentes de anotación para evitar que la remontada claretiana se produjera. Un parcial de 0-10 obligó al banquillo local a parar el choque. La renta blaugrana, sin embargo, siguió acercándose a la veintena (44-62).
El conjunto grancanario intentó recortar distancias en el marcador en el último cuarto, y pelear hasta el final por sus opciones, pero los vigentes campeones no cedieron ni un palmo. Los de Jasikevicius salieron al parqué del Gran Canaria Arena con una misión entre ceja y ceja, y firmaron cuarenta minutos de un baloncesto sin fisuras para evitar la sorpresa del ‘Granca’. Los amarillos sufren así su primera derrota del curso, y el sábado buscarán mejores sensaciones en una complicada visita al Unicaja de Málaga.
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