Dejando atrás los sinsabores del abandono en la pasada Subida de Tejeda, el piloto teldense Iván Cabrera Ravelo afronta este fin de semana su segunda cita de la temporada con la XIV Subida a La Pasadilla (Gran Canaria) teniendo asignado el número 5, de los 42 participantes en velocidad.
“Tras mi anterior y temprano abandono y con el tiempo transcurrido llego a esta prueba de montaña más tranquilo y motivado. Hemos aprovechado para cambiar el desconectador averiado y revisar al Hyundai Accent GT” comentaba este joven valor de nuestro deporte.
Un trazado que, como en aquella ocasión, también es nuevo para él y ofrece sus propias peculiaridades “es muy rápido, y al que hay que estar muy atento ya que tras una zona de alta velocidad te encuentras una curva muy lenta y estratégica”.
Si bien se mantiene la distancia total contra el crono en 7,10 kilómetros la novedad para esta nueva edición está en su nuevo asfaltado “he rodado bastante como reconocimiento de la carretera pero hay curvas que aún no me dan seguridad para abordarlas por el desnivel que tienen. En general me gusta mucho y con este firme muy liso podré sacarle más partido al coche con su suspensión de circuitos, más rígidas, aunque va bien con sus 110 caballos”.
Mirando a su competencia directa “está muy difícil en el grupo A2 ya que son vehículos más potentes que el mío por lo que será cuestión de aprovechar para medirnos con otros participantes”.
Con lo muy poco que se pudo rodar en Tejeda se puede decir que aquí empieza realmente la temporada y lo hace con un objetivo “acabar, que es lo que se espera. Mi planteamiento es tomarme la manga de entrenamientos para hacerme más al trazado y en las dos oficiales subir el nivel progresivamente para sacar el máximo partido a esta oportunidad”.
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