El delantero albanés de la Unión Deportiva Las Palmas se muestra contento tras tener más protagonismo en el conjunto grancanario y destaca la unión del vestuario. Además, prefiere dejar aparcado su renovación y centrarse en los próximos siete partidos.
De no contar con oportunidades, incluso hablarse de una posible marcha al Málaga, a ser titular y casi indiscutible. La temporada ha cambiado por completo para Armando Sadiku una vez ha llegado Xavi García Pimienta: «Con el mister de ahora, sabía que va a dar a todo jugador lo que merece, lo dijo el primer día. Yo sabía que como estaba entrenando todo el año, si seguía entrenando así el mister me iba a dar la posibilidad. Tengo mucha confianza en mí mismo», comentó el ’19’ de la Unión Deportiva este martes en su primera comparecencia en rueda de prensa de la temporada.
Cuestionado por sus celebraciones de los goles, él deja claro que es un jugador que lo da todo: «Hacía mucho tiempo que esperaba mi momento, nunca perdí la confianza. Celebro todos los goles así, como soy, porque me encanta marcar goles. Además hacía mucho tiempo que no jugaba, esperaba este momento. La celebración me sale del corazón», comentó el albanés.
Con la confianza del técnico barcelonés, el ariete amarillo reconoce que el mister «no me ha pedido mucho, solo hacer mi trabajo. El equipo me va a dar la pelota en el área. Ahora ha llegado mi momento y estoy aprovechando para hacer goles y ayudar al equipo, a veces cuando no marcó, ayudar en otras fases como en el último partido. Tener la pelota ahí arriba y sufrir».
Como toda la delantera, únicamente tiene un año de contrato y se le acaba este mismo verano, por lo que deja la puerta abierta a su continuidad pero se tratará tras la temporada: «Tengo muy buena relación con todos, los trabajadores, director deportivo, presidente … con todos. Estoy muy contento. Estoy de protagonista. Mi futuro tengo un año de contrato pero solo estoy concentrado en estos siete partidos», explicó el ’19’.
Sobre el vestuario, se deshace en elogios: «Nunca había visto un vestuario tan alegre y tan unido. A mitad de semana organizamos comidas juntos», además de que ahora sí creen en el objetivo: «Ya sabemos que tenemos calidad, solo que a veces no creíamos en lo que hacíamos. Habíamos hecho diversas charlas entre nosotros. Pienso que ahí fue la clave», comentó el albanés, que asegura que «ahora somos más fuertes que nunca»
udlaspalmas.net
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