Fránquiz-Diaz llegaron a ocupar la quinta plaza absoluta, aunque finalmente ninguna de las dos unidades del equipo pudo acabar la dura prueba conejera.
La primera cita del equipo Jovi Sport en el Campeonato Autonómico de Rallyes sobre tierra no será recordada con buen sabor de boca, aunque siempre se puede extraer una lectura positiva. Si bien Víctor Fránquiz-Raúl Díaz ni José María Umpiérrez-Sergio Hernández pudieron ver la meta final, ambos demostraron firmeza en unos tramos difíciles, y sólo la mecánica les traicionó mediada la jornada del pasado sábado 22 de junio. Sin duda Víctor Fránquiz y Raúl Díaz sorprendían desde el inicio con el Seat León, cuando en el tramo más largo del rallye lograban colarse en la quinta posición, a pesar de un error debido a la señalización del recorrido. “Perdimos una decena de segundos, pero el comienzo nos sorprendía incluso a nosotros mismos”, dijo el piloto tras un inicio que ya dejaba entrever lo duro que iba a ser el Rallye Isla de Los Volcanes. “Acabamos la mañana con una sensación rara, ya que debíamos mantener sana la mecánica”, a pesar de lo cual, y rodando con cautela, Fránquiz y Díaz rodaban siempre en el Top Ten, lo que les servía para estar entre los cinco mejores, por delante de vehículos mucho más potentes. Lamentablemente, y justo después de marcar el cuarto mejor tiempo absoluto en uno de los tramos, un soporte del motor cedía justo en la meta, complicando la existencia del equipo en competición. “La reparación nos hizo penalizar y rebasar el límite máximo, por lo que nos reenganchamos para comprobar que todo andaba en orden”, decidiendo posteriormente el titular de Jovi Sport dar por concluida su participación en Lanzarote, con el objetivo de no sufrir ningún percance innecesario en un rallye que se estaba cobrando muchas víctimas. Fránquiz-Díaz, que contaron con el apoyo de ServiVentura 24H, Gestiones Fuerteventura, EsteticPark, Clínicas ViltalDent Fuerteventura, Cafetería Son-Son, Mármoles Venus, Tapicería Maxorata, Autos Víctor Canarias, Sedane 2000, Taller La Antigua y Geinverstec Instalaciones, ya miran con optimismo su próxima participación.
José María Umpiérrez debutaba en rallyes con Sergio Hernández a la derecha del BMW 325i, y lo cierto es que sufrió más de lo deseado. Los pilotos que salían en la parte de atrás de la lista de inscritos se encontraron unas especiales ya muy deterioradas, además de sufrir las cancelaciones de los tramos y los recortes de los mismos en algunos de los casos. “Lo cierto es que a mitad de día habíamos corrido bastante poco, y lo que era peor, sabíamos que nuestro coche no lo iba a pasar bien por el estado de los tramos”, dijo el piloto de Fuerteventura, que prácticamente no había calentado bien avanzada la jornada. Y lo peor llegó en la quinta especial, cuando al poco de la salida el apoyo en un talud dañó la suspensión después de haber sufrido también un pinchazo. “Imagino que todo se fue resintiendo y al final la mecánica no pudo aguantar las duras condiciones del Isla de Los Volcanes”, apuntó un Umpiérrez que en cualquier caso valora como positivo el conocer como funciona un rallye desde dentro, lejos de los slalom y rallysprint en los que anteriormente participó. En Lanzarote contó con el apoyo de Aluminios Araya-Alusefuer, Grúas Fuer, Taller SD Automoción, Cafetería La Cencerra, Taller de Mecánica Suso, Autos Martel, CreArte y Quesos de Tetir.
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