El FC Barcelona Regal da primero. Y eso, en el conjunto culé, son palabras mayores. Las 40 veces que ha ganado el primer partido de una eliminatoria a cinco partidos, se ha acabado llevando la serie. Una estadística que hace sonreír pese al susto final, con el que los canarios castigaron la relajación azulgrana, para endosarles un parcial final que dejó el partido abierto cuando más controlado parecía para los azulgranas.
El conjunto amarillo triunfó en la primera mitad, con un orden defensivo capaz de frenar a su rival y una buena capacidad para explotar sus armas ofensivas. Pero todo cambió tras el descanso. Los insulares se deshicieron en el tercer cuarto. El Barça Regal se desató ofensivamente y los canarios sufrieron la soledad del cuarteto formado por Bellas, Newley, Báez y Nelson, que anotaron 57 de los 63 puntos canarios.
Al Barça Regal le bastó un cuarto de eficiencia para colocar la serie allá donde esperaban. Mantener la ventaja de campo. Y alejarse de los sustos. Gracias, sobre todo, a los pequeños momentos de Juan Carlos Navarro (14 puntos), el trabajo de CJ Wallace (13 puntos y 17 de valoración) y el buen hacer de Víctor Sada (7 puntos, 5 rebotes y 12 de valoración).
Pese a los detalles de clase de Ante Tomic (primero un bellísimo pase para Wallace y luego la facilidad con la que posteó a Báez), el Herbalife Gran Canaria tomaba ventaja en el marcador (8-12) tras un triple de Brad Newley que certificaba el acierto canario de cara al aro, pues habían anotado los cinco primeros tiros que habían lanzado. Y no sería una ventaja cualquiera.
Las facilidades que concedía el Barça Regal para las penetraciones permitían jugar a placer al Herbalife, que se mantenía en cabeza (10-16) pese a la naturalidad con la que los azulgranas buscaban y encontraban en la pintura a Tomic y sus 15 centímetros de diferencia con su par, Eulis Báez. El croata sumaba seis puntos y una asistencia en apenas cinco minutos. Pero el dominicano contestaba desde el 6,75. Obligándole a saltar allí donde un hombre de su estatura no está acostumbrado a llegar (11-19).
Xavi Pascual buscaba soluciones en el cambio de base primero, con la entrada de Víctor Sada, y en el de juego interior después, con Loukas Mavrokefalidis en pista, con la intención de frenar la versatilidad de Báez, que tanto lanzaba desde el exterior, como penetraba desde el triple, como se jugaba el cuerpo a cuerpo en la pintura.
Y el Herbalife Gran Canaria que vivía a placer, explotando al máximo su superioridad en el primer periodo. La diferencia alcanzaba los 10 puntos, con un contraataque fácil (11-21). Pero la aparición de Brad Oleson vino a enterrar la ilusión grancanaria. Cinco puntos consecutivos del de Alaska pusieron la diferencia en tan solo cinco tantos para el conjunto pío-pío (16-21). Una (des)ventaja que enterraba la grandeza canaria, que se había comprimido en una decena de puntos de diferencia, y colocaba el partido en la naturalidad.
Al inicio del segundo periodo, el encuentro se entrometía con el desacierto, cuando Tomás Bellas se creó el triple con velocidad, Oleson respondió y Sarunas Jasikevicius se sacó uno de sus pases para canasta de Joe Ingles, que ponía la ventaja canaria bajo mínimos (22-24). Tres instantes que sacaron el encuentro de la crudeza, pero que no cambiaban a su líder: Herbalife Gran Canaria.
Cuando mayor era el asedio de los locales, apareció la estrella visitante. Spencer Nelson puso en práctica esa movilidad a la que Lorbek tenía difícil respuesta para anotar cinco puntos seguidos (más un tiro libre con el esloveno ya en el banco) para incrementar la ventaja de los suyos (24-30).
Y, entonces, Juan Carlos Navarro hizo acto de presencia. El escolta, que contaba tres tiros por fallo hasta ese momento, se desperezó para anotar cinco tantos consecutivos, con posesión consumida canaria de por medio, y así animar al Palau Blaugrana con el 29-30. Y eso que el resultado no invitaba a levantarse del asiento una y otra vez. Además, la ventaja del Herbalife Gran Canaria se mantenía. Y lo haría al descanso. 29-30 era una lógica que reclamaban los dos equipos que menos puntos habían recibido en toda la fase regular de la Liga Endesa. Dos defensas alabadas y autoreclamadas.
El inicio del tercer periodo enseñó que en el túnel también se juega. Pedro Martínez recibió una técnica que cambió el marcador. E hizo que Navarro se metiera de lleno en el partido. Cinco puntos salidos directamente del túnel. De las manos de Juan Carlos Navarro. Y el FC Barcelona Regal que seguía escalando: 36-30 tras un rebote ofensivo de CJ Wallace.
Pero Herbalife Gran Canaria no perdía la lógica de su trabajo, y mantenía sus aspiraciones con el 38-36, mientras el Barça Regal caía en el tiro exterior (2/11 a mitad del tercer periodo; 5/23 al término del encuentro). Mas Sada y Wallace ponían el trabajo para que la brillantez definitiva corriese a cargo de Navarro, de cuyo tino parecía depender la capacidad azulgrana para escaparse en el marcador: 44-36 (minuto 25).
Cuando Nelson parecía querer asumir la responsabilidad, Víctor Sada anotaba un triple que ponía la máxima diferencia para el Barça Regal (47-38). Y Wallace colocaba la verdadera condena desde la bocina. Dos hombres, a la postre, clave en el triunfo. El 50-38 hundía a un Herbalife Gran Canaria que había cedido el norte al Barça Regal. Ryan Toolson había llegado al partido, pero su aportación estaba lejos de su media (y extremadamente lejos de su exhibición frente al Laboral Kutxa). El nivel defensivo canario parecía haberse resentido, en parte por la activación de Navarro, que afea cualquier defensa con su solo acierto. Spencer Nelson y Brad Newley (tres triples para el australiano) recortaban (50-43). Pero la recta final del tercer periodo era la viva imagen de la superioridad azulgrana.
El triple de Wallace hacía bueno el tiempo muerto con el que Pascual había tratado de detener la reacción canaria, Tomic regalaba una canasta franca a Oleson, que aumentaba la claridad de la imagen con un tapón a Toolson. La viveza de una superioridad que se mostraba tanto en la defensa azulgrana, como en la dificultad amarilla para mantener el nivel de la primera mitad, como en la comodidad con la que los locales parecían encontrar el aro en el tercer periodo. El 55-45 no eran solo 10 tantos de diferencia y el cambio de signo con respecto al descanso. Era también un aumento del nivel ofensivo (26-15 en el cuarto) que había soltado alguna de las bridas del encuentro. Lo que favorecía al caballo grande. Al caballo con más jinetes. Nueve jugadores azulgranas habían anotado, cuando los 45 puntos del Herbalife Gran Canaria llegaban exclusivamente de su quinteto titular.
El último periodo volvió a olvidar la anotación. Pero mantuvo el trabajo del Barça Regal. La soledad de Newley-Nelson-Báez impedía a los canarios aspirar a volver en el marcador. Y eso que el dominicano ponía mucho de su parte. Pero la sensación de ganador ya pertenecía al Barça Regal, que fue imponiéndola a lo largo de los primeros minutos del último cuarto, ahora con una acción en la que el exterior rival se estampa contra el interior, ahora en un rebote ofensivo cómodo, ahora con una canasta tras posteo de Lorbek, ahora con un mate relativamente fácil de Tomic. El 67-52 (minuto 37) era solo el número de una sensación. La del trabajo hecho en el tercer cuarto.
Pero entonces llegó la desconexión local. Y el orgullo visitante. El parcial de 9-0 que animaba el partido, colocando el 67-61 a falta de 1:33. Nelson, Bellas, Newley y la primera canasta de Toolson en el encuentro se habían encargado de animarlo. Lo hacían también los pasos de Navarro. Y el rebote ofensivo y canasta de Nelson, que permitía creer en la remontada en el último minuto: 67-63. Pero, tras el error de Marcelinho Huertas, Toolson falló el triple. Y, con él, se fueron las aspiraciones del Herbalife Gran Canaria de culminar una remontada que hubiera sido heroica.
Pese al susto final, que fue creciendo hasta ser real, el FC Barcelona Regal terminó sonriendo. Y es que los azulgranas saben que la estadística busca ser rota, pero si existe, es para la confianza. En las 40 series de Playoff de la Liga Endesa al mejor de cinco partidos en las que los barceloneses se han estrenado con victoria, se han acabado llevando la serie. Cuarenta no parecen pocos motivos para la confianza. Para olvidar la casualidad.
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