La UD Las Palmas afrontó el choque con varias novedades importantes en el once con respecto al equipo que perdió en Bilbao. Las bajas de Viera y Vicente por lesión y las vueltas de Jesé y Prince que hicieron que Quique Setién retocara el once, así como algunos cambios por decisión técnica en defensa, como la titularidad de David García.
Con la posibilidad de amarrar la permanencia de manera matemática y cambiar la mala imagen de San Mamés se presentaba ante su público el conjunto amarillo en una soleada tarde de abril.
Comenzó el partido con un disparo cruzado de Jesé que se marchó desviado. Buena ocasión para adelantarse de los insulares. De nuevo Jesé lo intentó con una acción dentro del área cuyo remate se marchó por poco, minutos de dominio amarillo.
En el minuto 15 Laguardia dejaba su puesto a Ely, que se incrustaba en la defensa vitoriana. Halilovic trató de sorprender con un disparo lejano, pero la pelota se fue alta, así se superó el ecuador de la primera mitad, con dominio local y mejores ocasiones, sin fruto.
La potencia de Theo arrancó la primera cartulina amarilla a Roque Mesa con una buena incursión por la banda siniestra. En el minuto 32 un lanzamiento de Halilovic rebotaba en la defensa pero no encontró meta. La UD lo intentaba sin acierto en un partido de escasa calidad futbolística hasta que apareció la magia de Prince para hacer un control excelso tras pase de Tana y batir de una vaselina sideral al guardameta Pacheco en el minuto 44, (1-0).
La segunda parte arrancó con cierto dominio local que se fue diluyendo a medida que el Alavés se fue estirando en busca de a igualada. Un tímido disparo de Halilović fue la escasa aportancion en los primeros compases de los grancanarios.
Y de esta forma se afrontó la última media hora de choque, con ventaja mínima y las espadas en todo lo alto.
En una jugada extraña llegaba el gol del Alavés por mediación de Ibai para anotar el (1-1) en una acción muy protestada por los jugadores y la afición local por posible posición antirraglamentaria.
El tanto encorajinó a los amarillos que se fueron decididamente a devolver el golpe encajado. Setién reforzó el medio campo dando entrada a Hernán por Tana. Después intentó revitalizar el ataque con la incursión del canterano Benito por el croata Halilović y con la entrada de Livaja por Prince pero el partido no salió del tedio consumándose el empate que garantiza la permanencia matemática de la UD Las Palmas. Antes Raúl con una mano prodigiosa evitó la derrota y Livaja resultaba expulsado.
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