El equipo grancanario ya empezaba a rodar en el top ten del certamen monomarca cuando sufrió una salida de carretera.
La segunda cita de la Copa Suzuki Swift era para Julio Martínez y Dani Sosa una nueva clase en su intenso aprendizaje en el Campeonato de España de Rallyes. El Rallye de Ourense los recibía con un recorrido largo y unos tramos con distancias considerables, un reto que los grancanarios no pudieron cumplir en su totalidad.
Una salida de carretera en la segunda pasada por el clásico ‘Cañón do Sil’ llevó al equipo apoyado por Revi S.L., SOALDEA, Cadena Logística, Transportes Tamarán, Parches y Ruedas, Mosan Motor, Cabildo de Gran Canaria y FotoMágica Fotografía a su primer abandono de la temporada en la Copa Suzuki Swift. “Me sabe mal por todo el esfuerzo que realizamos para estar en cada carrera”, dijo Julio Martínez al confirmar que no podía seguir en carrera. Este trance, por el que muchos pasan a lo largo de sus carreras deportivas, no esconde las buenas sensaciones que obtenían de su paso por los tramos del ‘Ourense 2015’. “Una vez visto con detenimiento nuestra participación encontramos motivos para ser positivos”, especialmente porque el ritmo ya era más alto que el mostrado en el Rallye Sierra Morena celebrado en mayo.
“Hemos reducido la distancia con la cabeza” después de haber marcado cronos entre los diez primeros y con una diferencia por kilómetro mucho mejor para sus intereses. “Estoy motivado para seguir luchando, las sensaciones han sido buenas”, apunta Martínez, una mejora que también se debe “a la compenetración y atención” con las notas, a la postre la gran novedad en la temporada de Julio, que como muchos saben llega al nacional después de su experiencia en el karting, los circuitos y la montaña.
Julio Martínez y Dani Sosa comenzaban con el noveno mejor tiempo de la Copa Suzuki Swift, posición que marcaban en la súper especial de ‘San Cibrao’, celebrada en la noche del viernes. Esa posición la calcaban en ‘Cañón do Sil 1’, que con sus 32 kilómetros cronometrados era todo un reto. ‘San Pedro de Rocas 1’ iba también a buen ritmo hasta que un trompo, con calada de motor incluida, les hizo ceder alrededor de medio minuto y, con ello, quedarse a las puertas del top ten en el certamen monomarca. De manera paralela, este percance no les descabalgaba del podio en la Copa de España Júnior, donde eran terceros por detrás de un vehículo turbo y tracción total y otro de la categoría R2.
Pero la repetición de ‘Cañón do Sil’ acabó con sus ilusiones cuando iban un segundo por kilómetro más rápidos. Una salida de carretera dañaba, principalmente, la geometría de la rueda delantera izquierda y, aunque acababan el tramo, no podían continuar. Ahora todos los esfuerzos se centran en la siguiente cita, ya en Portugal, que se celebra en dos semanas.
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