Un Herbalife Gran Canaria desencadenado derrotó al Montakit Fuenlabrada a base de triple.
Con el quinto puesto ya confirmado, con rival establecido para el Playoff y siendo ya la penúltima jornada del curso, el Herbalife Gran Canaria parecía entrar al choque con muy pocos alicientes. Pero este grupo es capaz de convertir en historia lo intrascendente.
Tras unos primeros desaciertos por parte de ambos equipos, Kevin Pangos sacó a relucir la muñeca. El canadiense llevaba varios partidos de baja anotación, como casi todos sus compañeros de perímetro, y con su padre Bill en la grada sintió la necesidad de reivindicarse. De demostrar que su primer año profesional estaba lejos de acabar. Kev anotó tres triples sin fallo en los primeros tres minutos. Newley se le unió y Savané, omnipresente, aportó dos puntos para un parcial de 14-2 que obligó a Cuspinera a parar el choque.
El Fuenla, uno de los mejores equipos de perímetro de toda la ACB, se sujetaba a sus opciones por mediación de Sobin, que hacía un roto en la pintura. La baja por molestias de Alen Omic fue muy bien aprovechada por el cuadro fuenlabreño, que reaccionó desde la pintura para dar solidez y frescura a su juego. Un parcial de 5-14 les metía de lleno (19-16, minuto 7) y obligaba a Aíto a pararlo. El ritmo no bajó ni un ápice, con DJ Seeley y Marko Popovic cogiendo el testigo de protagonistas exteriores. Al término del primer cuarto, marcador de NBA (28-26).
Y no bajó el tempo. Savané abrió fuego en el segundo acto y luego asistió para el cuarto triple sin fallo de Kevin Pangos. Popovic mantenía a los suyos con un auténtico recital, pero por momentos el croata estaba muy solo. En cambio, el juego coral de los de Aíto no hacía si no brillar a cada ocasión que tenía. Pasecniks, que se fue hasta los 10 puntos y 5 rebotes, aportaba el balance necesario.
El Granca mantuvo su alegría y el Fuenla, a pesar de los coletazos individuales de genialidad, veía cómo la brecha aumentaba poco a poco hasta alcanzar los dobles dígitos (45-35, minuto 17). El mate al contrataque de Xavi Rabaseda forzó el tiempo muerto de un Cuspinera claramente cabreado con la actuación arbitral. A poco más de un minuto del descanso, Paunic recibió una técnica por protestar que acabó cimentando un parcial de 10-2 clave para romper el choque en la primera mitad (60-41).
El inicio del tercer cuarto había sido algo más flojo. Ambos equipos tenían más dificultades para anotar y Paunic materializaba el primer triple del segundo tiempo. A pesar de la buena acción de su equipo, Cuspinera protestó airado lo que pareció ser una falta clara de Pangos no señalada, y a pesar de que parecía haberse tranquilizado al anotar el canadiense su tiro libre, el técnico siguió protestando y acabó recibiendo la segunda técnica y descalificante.
El Montakit Fuenlabrada se vio entonces superado por la situación. Además de lo que entendían como una actuación arbitral perjudicial, el Herbalife Gran Canaria estaba siendo claramente superior. Y la renta llegó a sobrepasar los 20 puntos con un triple de Brad Newley (69-46, minuto 24). Otro triple de Newley, ya en la recta final del cuarto, mantenía la renta en esos 23 puntos de tope. Pero el Fuenla aprovechó unos malos minutos amarillos para lograr un parcial de 2-10 para maquillar un poco el marcador (79-64).
Después de ese agridulce sabor de boca dejado por los malos instantes finales de tercer acto, el Herbalife Gran Canaria volvió a la pista dispuesto a brindar una fiesta absoluta a su afición. Y lo hizo anotando 30 puntos en 10 minutos para llegar a 109 anotados, el récord histórico del club en la ACB. Una muesca más en el historial de Aíto en el equipo, y de este hambriento grupo de jugadores que, tras una final de Copa del Rey y una semifinal de Eurocup, quiere más.
Pangos, cómo no, cerró la anotación con un triple para el 6/9 en acierto personal. Un 109-88 definitivo que sirve para despedir el baloncesto del Gran Canaria Arena hasta dentro de dos semanas. En dos semanas, el ambiente deberá ser de gala. Y la tensión máxima. Visitará el pabellón el Laboral Kutxa Baskonia en Playoff.
Tras unos primeros desaciertos por parte de ambos equipos, Kevin Pangos sacó a relucir la muñeca. El canadiense llevaba varios partidos de baja anotación, como casi todos sus compañeros de perímetro, y con su padre Bill en la grada sintió la necesidad de reivindicarse. De demostrar que su primer año profesional estaba lejos de acabar. Kev anotó tres triples sin fallo en los primeros tres minutos. Newley se le unió y Savané, omnipresente, aportó dos puntos para un parcial de 14-2 que obligó a Cuspinera a parar el choque.
El Fuenla, uno de los mejores equipos de perímetro de toda la ACB, se sujetaba a sus opciones por mediación de Sobin, que hacía un roto en la pintura. La baja por molestias de Alen Omic fue muy bien aprovechada por el cuadro fuenlabreño, que reaccionó desde la pintura para dar solidez y frescura a su juego. Un parcial de 5-14 les metía de lleno (19-16, minuto 7) y obligaba a Aíto a pararlo. El ritmo no bajó ni un ápice, con DJ Seeley y Marko Popovic cogiendo el testigo de protagonistas exteriores. Al término del primer cuarto, marcador de NBA (28-26).
Y no bajó el tempo. Savané abrió fuego en el segundo acto y luego asistió para el cuarto triple sin fallo de Kevin Pangos. Popovic mantenía a los suyos con un auténtico recital, pero por momentos el croata estaba muy solo. En cambio, el juego coral de los de Aíto no hacía si no brillar a cada ocasión que tenía. Pasecniks, que se fue hasta los 10 puntos y 5 rebotes, aportaba el balance necesario.
El Granca mantuvo su alegría y el Fuenla, a pesar de los coletazos individuales de genialidad, veía cómo la brecha aumentaba poco a poco hasta alcanzar los dobles dígitos (45-35, minuto 17). El mate al contrataque de Xavi Rabaseda forzó el tiempo muerto de un Cuspinera claramente cabreado con la actuación arbitral. A poco más de un minuto del descanso, Paunic recibió una técnica por protestar que acabó cimentando un parcial de 10-2 clave para romper el choque en la primera mitad (60-41).
El inicio del tercer cuarto había sido algo más flojo. Ambos equipos tenían más dificultades para anotar y Paunic materializaba el primer triple del segundo tiempo. A pesar de la buena acción de su equipo, Cuspinera protestó airado lo que pareció ser una falta clara de Pangos no señalada, y a pesar de que parecía haberse tranquilizado al anotar el canadiense su tiro libre, el técnico siguió protestando y acabó recibiendo la segunda técnica y descalificante.
El Montakit Fuenlabrada se vio entonces superado por la situación. Además de lo que entendían como una actuación arbitral perjudicial, el Herbalife Gran Canaria estaba siendo claramente superior. Y la renta llegó a sobrepasar los 20 puntos con un triple de Brad Newley (69-46, minuto 24). Otro triple de Newley, ya en la recta final del cuarto, mantenía la renta en esos 23 puntos de tope. Pero el Fuenla aprovechó unos malos minutos amarillos para lograr un parcial de 2-10 para maquillar un poco el marcador (79-64).
Después de ese agridulce sabor de boca dejado por los malos instantes finales de tercer acto, el Herbalife Gran Canaria volvió a la pista dispuesto a brindar una fiesta absoluta a su afición. Y lo hizo anotando 30 puntos en 10 minutos para llegar a 109 anotados, el récord histórico del club en la ACB. Una muesca más en el historial de Aíto en el equipo, y de este hambriento grupo de jugadores que, tras una final de Copa del Rey y una semifinal de Eurocup, quiere más.
Pangos, cómo no, cerró la anotación con un triple para el 6/9 en acierto personal. Un 109-88 definitivo que sirve para despedir el baloncesto del Gran Canaria Arena hasta dentro de dos semanas. En dos semanas, el ambiente deberá ser de gala. Y la tensión máxima. Visitará el pabellón el Laboral Kutxa Baskonia en Playoff.
No hay comentarios:
Publicar un comentario