El Herbalife Gran Canaria no puede con el líder (77-68)

El Unicaja, con un parcial de 25-8 en el segundo cuarto, gozó de una cómoda segunda mitad ante un Herbalife Gran Canaria que nunca llegó a tener opciones reales de victoria.

Con la novedad de Ian O’Leary en el quinteto titular formando pareja interior con Edy Tavares, el Herbalife Gran Canaria saltó a la pista del Martín Carpena con ganas de morder. Fuertes en defensa gracias a la intimidación del pívot caboverdiano, la labor en la retaguardia cimentó los primeros ataques amarillos. La ofensiva estuvo marcada por el carácter incisivo de los exteriores. Newley, con cuatro puntos, y Kuric, con dos, fueron los protagonistas en los primeros compases (2-6, minuto 3).

Salida con ganas

Rápidamente surgió la figura de Ryan Toolson. El examarillo estaba dispuesto a firmar otro partidazo ante su antiguo equipo, y con cinco puntos consecutivos puso por delante a los locales. El partido era un constante toma y daca en el que acababa ganando el Unicaja gracias al acierto exterior. Dos triples consecutivos de Kuzminskas, imparable en todas las facetas, mantenía por arriba a los andaluces. La diferencia llegaba a los cuatro puntos con otro tiro desde más allá de 6,75 de Jayson Granger.
Un parcial de 0-7 daba alas al Herbalife Gran Canaria. Los de Aíto García Reneses demostraron fondo de armario y fue el recién llegado Sasu Salin quien se encargó, con seis puntos, de poner por arriba a los isleños antes del final del primer cuarto (17-19).
No empezaba mal el segundo cuarto con otro acierto de tres del finés Salin. La diferencia alcanzó los cinco puntos pero la ventaja fue efímera.

Unicaja rompe el partido

La intensidad defensiva del Herbalife Gran Canaria fue menguando poco a poco, y esto se unía a una sequía anotadora considerable. Sin muchas ideas, el Unicaja no precisó de apretar el acelerador para coger velocidad de crucero y pasar por un lado al conjunto claretiano. Así, un parcial de 10-0 con un activo Fran Vázquez ponía cinco arriba a los malagueños (27-22, minuto 15).
La inercia parecía inexorable e insalvable. El Herbalife Gran Canaria parecía perdido en la pista, sin la mordiente del inicio del choque ni en ataque ni en defensa. Así le fue fácil al conjunto andaluz coger una ventaja significativa. Ryan Toolson se erigió como protagonista ofensivo para acabar la primera parte con 16 puntos y 3/4 en triples. Los grancanarios lograron mantenerse a una distancia de ocho puntos durante varios ataques de acierto, con dos vuelos estéticos de O’Leary, pero en cuanto el grifo se cerró Unicaja consiguió llegar a los dobles dígitos antes del descanso (42-30).
Tras la reanudación el Herbalife Gran Canaria no mostró signos de mejora. Unicaja seguía controlando el tempo del choque sin aparente esfuerzo, con un orden constante que aniquilaba cualquier esperanza amarilla. Tavares, con dos tiros libres, ponía la diferencia en diez puntos (46-36, minuto 23), pero luego Will Thomas, inédito hasta el momento, lograba acertar desde 6,75 para volver a abrir la brecha.
En todo el tercer cuarto la escuadra claretiana fue incapaz de bajar de los diez puntos de desventaja. Los amarillos seguían yendo a remolque, sin la garra suficiente para recuperar distancias. A falta de diez minutos, tocaba remontar trece puntos (60-47).

Sin garra suficiente

El último cuarto arrancó con la novedad de DaJuan Summers, que hasta ese momento no había disputado ni un minuto. El de Baltimore se mostró intenso y activo, anotando cuatro puntos consecutivos que mantenían con algo de vida a los grancanarios (62-51, minuto 33).

Unicaja jugaba con el crono con una comodidad pasmosa, la misma que había tenido desde mediados del segundo cuarto del choque, cuando lograron abrir brecha. Bellas, de tres, volvía a situar la diferencia en los diez puntos (64-54, minuto 35). Quedaba tiempo, pero ahí estaba Germán Gabriel para clavar un triple.
El Herbalife Gran Canaria luchaba a pesar de verse hasta dieciséis abajo, y una bandeja fácil de Newley tras robo forzaba el tiempo muerto de Joan Plaza tras un parcial de 0-7 (72-63, minuto 39). Pero solo quedaba minuto y medio para el final, y los malacitanos no estaban dispuestos a dejar un partido que tenían hecho desde el segundo acto.
Al final, una canasta sobre la bocina de Kendall dejó el resultado definitivo en 77-68, un marcador que refleja más o menos fielmente la superioridad absoluta demostrada por Unicaja.