Partido con olor a permanencia en Riazor. La baja sensible de Willian José en la punta de lanza, por sanción, abrió las puertas de la titularidad a un Sergio Araujo ávido de goles y ansioso por ofrecer su mejor versión tras pasar por una travesía por el desierto. El resto del bloque, el mismo que derrotó la pasada jornada a todo un Valencia en el Estadio de Gran Canaria, encandilando con su fútbol en la segunda parte, con la inclusión de Nili, que volvió a la convocatoria y a la titularidad. Setién rescató la electricidad del veloz canterano para el extremo diestro.
Partido pasado por agua, una copiosa lluvia caía sobre La Coruña antes del inicio del choque, algo que a priori, no favorece al juego amarillo, aunque ya ganaran en campos anegados como Ipurúa. Sin embargo, pronto apareció un tímido sol. Las Palmas intentó desplegar su juego desde el principio, ante la presión del rival, que también se jugaba la tranquilidad absoluta en su feudo.
Las Palmas, que vistió de rosa, empezó fiel a su propuesta, intentando manejar el partido. La primera aproximación llegó de una acción de Nili, que centró con tranquilidad desde la derecha sin encontrar rematador. Durante los primeros minutos Las Palmas dominó y el Deportivo intentó arrebatar el balón a los canarios. En el minuto 22, ovación cerrada a Valerón de la grada de Riazor.
El partido se encaminaba a la media hora de partido, cuando Araujo estuvo a punto de cazar un balón dentro del área, aunque estuvo algo lento. Un envio de lucas Pérez a Sidnei que remató de tacón. Antes Nili lo intentó con un lanzamiento. Con (0-0) se llegó al descanso.
Lucas Pérez consiguió adelantar al equipo local en el minuto 47 de partido. Cazó un balón en las inmediaciones del área y consiguió batir a Javi Varas (1-0). El gol llegó en una acción aislada y no hacía justicia a los méritos contraídos por ambos rivales sobre el terreno de juego. A los grancanarios les faltaba dar un paso más para buscar el empate. En el minuto 55 Nili pudo anotar, pero el tanto fue anulado por fuera de juego, por muy poco. Entonces apeció el Chino para acabar con sus fantasmas y en una contra, empatar el partido tras un servicio medido de Momo, (1-1).
El tanto dio alas a la UD Las Palmas y generó dudas en las filas gallegas, con media hora por delante y todas las incógnitas por despejar. El choque ganaba en emoción a medida que transcurrían los minutos. El tanto podía llegar en cualquier momento por parte de cualquier bando. Luis Alberto hizo emplearse a fondo a Javi Varas con un tiro raso y ajustado. De nuevo Juanfra lo intentó, el balón, potente, se marchó por poco.
Riazor se puso en pie para ovacionar la salida de Juan Carlos Valerón, que saltó al campo con Nili en el minuto 68 de encuentro. Lucas Pérez volvió a buscar las cosquillas a Javi Varas, que estuvo atento a la acción. La réplica llegó en una galopada de Dani Castellano, que conectó con Jonathan Viera, intento fallido.
La presencia de Lucas Pérez era una amenaza constante para Las Palmas. Luis Albertó perdonó el segundo con todo a favor en el minuto 75, serio aviso. De nuevo los deportivistas volvían a la carga sin renunciar al triunfo, ni mucho menos. Nabil El Zhar entró por Momo para refrescar el ataque en los últimos minutos. Entonces un centro de marroquí lo aprovechaba David García, tras cesión de Aythami, para llegar desde atrás y marcar el (1-2), dejando mudo el Estadio de Riazor. El capitán se lo dedicó a su madre para sacar lustre a su momento dulce de juego.
Aún así, un remate de Juanfra a punto estuvo de dar un disgusto al equipo grancanario cuando el partido agonizaba. Lopo también pudo empatar. Pero fue Araujo el que puso la puntilla culminando una contra y anotando el (1-3) de un triunfo brillante que casi certifica la permanencia.
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