Gustavo Sosa y Eduardo González se alzaron este pasado sábado con la octava posición absoluta en el Rally de Tierra Norte de Extremadura. Penúltima de las carreras del calendario 2015 del nacional de tierra, para el equipo canario era su última participación en Península esta temporada y por ello tenían ganas de despedirse con muy buen sabor de boca. Se logró el objetivo, aunque en la meta final de la Plaza Mayor de Plasencia ambos tenían la impresión de haber podido alcanzar posiciones más altas.
Sabían que la clave iba a estar en ser capaces de salir desde primera hora con el mismo empuje con el que terminaron en Cervera semanas atrás, pero el polvo en suspensión y un incómodo bajón de rendimiento de los frenos en la sección inaugural lo hizo imposible. En algunos puntos del TC1 la visibilidad era casi nula y eso llevó a Sosa a tener que ralentizar su paso, aunque con la posterior neutralización de esta especial no afectó al majorero y su joven copiloto grancanario.
Pero desde el TC2, el de ‘Sierra de Dios 1’, los frenos del Ford Fiesta R5 empezaron a dar signos de fatiga, lo que hizo mella en su confianza. Este mismo inconveniente provocó que se fueran largos en la entrada de un viraje en la repetición de este tramo. En plena lucha por el ‘top ten’, los mecánicos de RMC Motorsport se emplearon a fondo para intentar mitigar ese problema de cara a la segunda mitad de la carrera, precisamente la que se iba a desarrollar sobre un recorrido mucho más rápido.
Tras hacer algunos ajustes en la configuración del Ford Fiesta R5 con los colores de DISA, Turismo de Fuerteventura, Oasis Park y Hertz, Sosa comenzó a recuperar en esos tramos que se adaptaban bien a su estilo de conducción. Terminada la penúltima sección ya ascendían a la novena posición y en la última, ya con la confianza al máximo, volvían a escalar otro puesto más para acabar octavos, mejorando así el resultado obtenido en Cataluña hace semanas.
Sosa estaba satisfecho al alcanzar la meta de esta carrera, pero a la vez con cierto sabor agridulce al recordar lo sucedido por la mañana. “Al principio fue un poco frustrante porque iba camino de ser uno de esos rallies en los que no puedes encadenar dos tramos sin problemas. Pero los mecánicos de Roberto Méndez hicieron posible que pudiéramos ir ganando confianza en la segunda parte del rally y en cuanto vimos que el coche permitía atacar mejoramos muchísimo nuestros tiempos en los dos tramos finales. Esto nos reafirma en nuestra decisión de apostar por el R5 en el CERT. Me quedo con lo positivo, que ha sido mucho en esa última sección”, ha explicado el de DISA.
Para Edu González era su segunda participación en el nacional con Sosa y, como él, su estreno en tierras extremeñas. “Las complicaciones de la mañana nos dificultó un poco esa progresión después de lo visto en Cervera. Lo más positivo es que en los dos tramos finales, los que hicimos completamente libres de problemas, se vio que volvíamos a estar tan cerca”, ha explicado el grancanario.
Ahora Gustavo deberá cambiar el chip de tierra por el de asfalto para preparar la IV Subida Betancuria-Isla de Fuerteventura que tendrá lugar el próximo fin de semana y en la que estará al volante de un Mitsubishi Lancer Evo X de Adas Sport. Esta participación le servirá además como preparación para el Rally Comunidad de Madrid RACE del próximo mes de noviembre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario