El equipo alemán se apoyó en 16 puntos de su base en el último cuarto para sumar el triunfo.
Con máxima igualdad en el grupo D, la tercera jornada de la 7Days Eurocup fragmentaría un poco la tabla clasificatoria. En este aspecto, el Herbalife Gran Canaria buscaba sumar su segundo triunfo en el torneo en la siempre complicada pista del Ratiopharm Ulm, un equipo que había derrotado ya en su cancha al Tofas Bursa, verdugo de los grancanarios en la segunda fecha.
Ryan Thompson anotó la primera y fue un mero aviso de lo que estaba por venir. El equipo de Thorsten Leibenath contaba con la ausencia de Tim Ohlbrecht, su único pívot puro. Ante esta baja, el conjunto teutón presentó un quinteto con falta de estatura y de no excesivo físico. Los de Casimiro salieron enchufados, con concentración y dispuestos a imponer el tempo del partido. DJ Seeley fue el faro ofensivo de los claretianos, anotando cinco puntos consecutivos (8-13, minuto 5) para abrir brecha.
Una diferencia que llegó a ser de siete puntos con Xavi Rabaseda en pista. El alero catalán fue el primer hombre exterior en entrar desde el banquillo y fue capaz de apretar en defensa. Pero el Ratiopharm Ulm, con Murry y Lewis en pista, también fue capaz de aumentar ese nivel de intensidad, y poco a poco fue recuperando la desventaja. También fue importante la figura de Luke Harangody, autor de cinco puntos consecutivos que apretaron el choque al término del primer acto (23-26).
Murry clavó un cómodo lanzamiento exterior en la primera acción del segundo cuarto para empatar el choque. Los bávaros estuvieron varios minutos por delante en el electrónico cuando el ritmo anotador bajó con respecto al primer parcial. La pareja formada por Báez y Oliver permitió a los amarillos evitar que los locales se marcharan en el marcador. Oliver, que bajó su aportación anotadora en los dos últimos encuentros de temporada, volvió a mostrar su versión más productiva. Un triple suyo (36-38, minuto 17) volvía a dar algo de renta a los isleños.
El base cerró la primera mitad con 11 puntos, pero el dato de Ryan Thompson fue mejor. El trotamundos de Nueva Jersey, profesional desde 2011, sumó 12 puntos siendo un quebradero de cabeza para la defensa claretiana. El americano, actuando de alero, causó estragos con su potencia física, penetrando con facilidad y desquiciando a todo oponente que tuvo delante. Convirtió los últimos cuatro puntos de su equipo en la primera parte, fallando dos tiros libres, y dejó a los suyos a tan solo un punto antes del intermedio (43-44).
Era el primer arreón serio de la noche de la escuadra amarilla pero no se prolongó mucho más en el tiempo. Tuvo un triple Rabaseda para disparar la ventaja por encima de los dobles dígitos, pero lo erró. Y el equipo de Ulm se reconectó a través de Harangody y una suspensión del menudo Günther hizo que Casimiro parara el partido. El tiempo muerto, sin embargo, no funcionó y Akpinar selló la remontada con dos triples consecutivos para culminar un parcial 13-0. La irrupción de Marcus Eriksson fue clave para los visitantes, que consiguieron aguantar el empuje alemán para encarar el cuarto definitivo con una mínima desventaja (68-65).
Como ya sucediera en el tercer cuarto, la salida del Herbalife Gran Canaria en el último acto fue trepidante. Tras encajar un punto, los claretianos lograron un parcial de 0-9 comandado por la energía de Paulí y el acierto de Eriksson. El parcial obligó al entrenador local a parar el choque (69-74, minuto 33) con siete minutos todavía para acabar el encuentro. Y surtió efecto. Fue gaseoso el arreón amarillo y el equipo local volvió a recuperar el terreno perdido sin mucha dificultad.
Fotu se estrenó, Murry clavó un triple y Butler anotó para un parcial de 8-0 durante casi tres minutos de cuarto que asfixió a los isleños. Era una montaña rusa de aciertos y desaciertos para los de Casimiro, que ya no volverían a tener ventajas en la noche. Cuando el Herbalife Gran Canaria quiso reaccionar, la figura del base Per Günther dinamitó el choque. El menudo líder de Ratiopharm Ulm anotó la friolera de 16 puntos en el último cuarto con una serie de 4/5. Incluido, además, uno sobre la bocina que selló el triunfo alemán en diez puntos.
Segunda derrota consecutiva de los amarillos en la 7Days Eurocup pero con, aún, siete partidos por disputar.
Ryan Thompson anotó la primera y fue un mero aviso de lo que estaba por venir. El equipo de Thorsten Leibenath contaba con la ausencia de Tim Ohlbrecht, su único pívot puro. Ante esta baja, el conjunto teutón presentó un quinteto con falta de estatura y de no excesivo físico. Los de Casimiro salieron enchufados, con concentración y dispuestos a imponer el tempo del partido. DJ Seeley fue el faro ofensivo de los claretianos, anotando cinco puntos consecutivos (8-13, minuto 5) para abrir brecha.
Una diferencia que llegó a ser de siete puntos con Xavi Rabaseda en pista. El alero catalán fue el primer hombre exterior en entrar desde el banquillo y fue capaz de apretar en defensa. Pero el Ratiopharm Ulm, con Murry y Lewis en pista, también fue capaz de aumentar ese nivel de intensidad, y poco a poco fue recuperando la desventaja. También fue importante la figura de Luke Harangody, autor de cinco puntos consecutivos que apretaron el choque al término del primer acto (23-26).
Murry clavó un cómodo lanzamiento exterior en la primera acción del segundo cuarto para empatar el choque. Los bávaros estuvieron varios minutos por delante en el electrónico cuando el ritmo anotador bajó con respecto al primer parcial. La pareja formada por Báez y Oliver permitió a los amarillos evitar que los locales se marcharan en el marcador. Oliver, que bajó su aportación anotadora en los dos últimos encuentros de temporada, volvió a mostrar su versión más productiva. Un triple suyo (36-38, minuto 17) volvía a dar algo de renta a los isleños.
El base cerró la primera mitad con 11 puntos, pero el dato de Ryan Thompson fue mejor. El trotamundos de Nueva Jersey, profesional desde 2011, sumó 12 puntos siendo un quebradero de cabeza para la defensa claretiana. El americano, actuando de alero, causó estragos con su potencia física, penetrando con facilidad y desquiciando a todo oponente que tuvo delante. Convirtió los últimos cuatro puntos de su equipo en la primera parte, fallando dos tiros libres, y dejó a los suyos a tan solo un punto antes del intermedio (43-44).
Günther dinamita el partido
Thompson no se enfrió en el paso de vestuarios. El de Jersey anotó dos tiros libres nada más saltar al parqué para adelantar a los alemanes en el electrónico. Sin embargo, fueron dos puntos que llegaron antes del mejor momento defensivo de la noche de los de Luis Casimiro. Y, por tanto, del mejor parcial. Los claretianos arrancaron un 0-9 en el que Báez y Rabaseda se erigieron protagonistas. Ambos por el trabajo defensivo y el dominicano, también, por el ofensivo. El capitán amarillo clavó un triple y luego la hundió tras un robo (45-53, minuto 24) para forzar el tiempo muerto de Leibenath.Era el primer arreón serio de la noche de la escuadra amarilla pero no se prolongó mucho más en el tiempo. Tuvo un triple Rabaseda para disparar la ventaja por encima de los dobles dígitos, pero lo erró. Y el equipo de Ulm se reconectó a través de Harangody y una suspensión del menudo Günther hizo que Casimiro parara el partido. El tiempo muerto, sin embargo, no funcionó y Akpinar selló la remontada con dos triples consecutivos para culminar un parcial 13-0. La irrupción de Marcus Eriksson fue clave para los visitantes, que consiguieron aguantar el empuje alemán para encarar el cuarto definitivo con una mínima desventaja (68-65).
Como ya sucediera en el tercer cuarto, la salida del Herbalife Gran Canaria en el último acto fue trepidante. Tras encajar un punto, los claretianos lograron un parcial de 0-9 comandado por la energía de Paulí y el acierto de Eriksson. El parcial obligó al entrenador local a parar el choque (69-74, minuto 33) con siete minutos todavía para acabar el encuentro. Y surtió efecto. Fue gaseoso el arreón amarillo y el equipo local volvió a recuperar el terreno perdido sin mucha dificultad.
Fotu se estrenó, Murry clavó un triple y Butler anotó para un parcial de 8-0 durante casi tres minutos de cuarto que asfixió a los isleños. Era una montaña rusa de aciertos y desaciertos para los de Casimiro, que ya no volverían a tener ventajas en la noche. Cuando el Herbalife Gran Canaria quiso reaccionar, la figura del base Per Günther dinamitó el choque. El menudo líder de Ratiopharm Ulm anotó la friolera de 16 puntos en el último cuarto con una serie de 4/5. Incluido, además, uno sobre la bocina que selló el triunfo alemán en diez puntos.
Segunda derrota consecutiva de los amarillos en la 7Days Eurocup pero con, aún, siete partidos por disputar.
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