El joven piloto de KTM y Valsebike ha recorrido media Europa compitiendo en la República Checa, Gran Bretaña, Bélgica y Holanda en un periplo con principio y fin en Canarias que ha tenido una parada en el Campeonato de España de MX125. Más de dos meses de continuo trasiego de maletas, carreteras y aeropuertos que han servido a Mahy para adquirir una gran experiencia y enamorarse, aún más, del motocross.
Si para cualquier joven de su edad las vacaciones estivales son el momento de abrir paréntesis, descansar y dedicarse a la vida contemplativa, para Mahy Villanueva éstas de 2013 han sido todo menos eso. Desde mediados de julio y hasta hace sólo unas semanas el piloto de Maspalomas ha recorrido cinco países y disputado un total de ocho pruebas del mundial, el europeo, el nacional y el regional de Motocross.
Ocho semanas frenéticas que han puesto a prueba no sólo el nivel de pilotaje del piloto de KTM, también su preparación física y menta. Después de acabar sexto en el Campeonato de España de MX125 en Benicarló (Castellón) Villanueva se dirigió al Sur de Península para realizar un stage de preparación en Sevilla previo a su viaje a la República Checa para participar en la quinta prueba del Campeonato de Europa de MX. Allí, en Loket realizó una impresionante clasificatoria al terminar decimotercero, aunque en carrera acabó en el puesto 24.
Mahy tuvo que lidiar en cada prueba con circuitos, en su inmensa mayoría, totalmente desconocidos para él y muy complejos, algo que se notó en las mangas oficiales. Sólo una semana después de Loket Villanueva y su familia se desplazaron a Jinin –también en la República Checa– para seguir con su tour, pero esta vez en una prueba del mundial de 125. En el más difícil de los trazados y con un nivel como nunca antes había visto, el grancanario obtuvo el vigésimo sexto mejor registro, pero fue imposible hacerse con un puesto en la parrilla. “Lo intenté con todas mis fuerzas, pero nos faltó un poquito para
poder estar con los pilotos mundialistas en carrera. Fue una pequeña decepción, pero creo que no fue un problema de pilotaje, sino de experiencia y de adaptarme a un campeonato increíble como es el mundial”, explicó Mahy.
El piloto de Valsebike Motos viajó una semana más tarde a Bastogne, en Bélgica. Otra vez en el Campeonato de Europa de Motocross (EMX) y, de nuevo, con un papel en entrenamientos sobresaliente al hacerse con el duodécimo mejor tiempo. En carrera volvió a notar esa falta de adaptación a este certamen y cayó a la posición 38. Casi sin tiempo para metabolizar todas las lecciones que dejó la cita belga Mahy dio el salto a Gran Bretaña para volver al circuito de Matterley Basing. Una prueba en la que el pasado año se quedó a las puertas del que debía ser su debut continental y que le debía una al canario. Allí volvió a clasificarse con total solvencia para carrera subiendo otro peldaño más para ser el 34. El EMX tuvo su punto final en Lierop, Holanda, los días 24 y 25 de agosto. Punto final para el tour continental del joven isleño que fue trigésimo segundo.
Con ese increíble bagaje de cuatro carreras en cinco semanas y la convivencia con pilotos y equipos que forman parte de la élite mundial del motocross, Villanueva volvió a España para dirigirse a Murcia, sede de la quinta y definitiva prueba del nacional de MX125. Antes, por el camino, se detuvo en Lleida para correr en una carrera del regional catalán que tuvo lugar en la localidad de Bellpuig. Ya en Molina de Segura Mahy demostró cuál es su nivel en el Campeonato de España. Undécimo en entrenamientos, sexto en la primera manga y abandono en la segunda al romper el piñón de ataque de su moto cuando estaba dando caza al cuarto clasificado.
“Ha sido el verano más increíble de mi vida”, afirma el piloto de Maspalomas, que aún tuvo fuerzas para correr en San Miguel de Abona el fin de semana pasado una carrera del regional canario logrando dos victorias en su categoría y tercero absoluto muy cerca de los cronos de rivales con motos de 450 cc cuando él iba a lomos de una KTM ‘dos y medio’. “Ha sido durísimo porque hemos recorrido alrededor de 10.000 kilómetros en sólo unas semanas. Hemos conocido a mucha gente que comparte la misma pasión que yo, el motocross, y hemos hecho muchos amigos que nos han ayudado en este viaje. He cogido mucha experiencia compartiendo pista con los mejores pilotos del mundo y de Europa y he descubierto circuitos a los que ojalá vuelva en un futuro. Seguro que si repito los resultados serán mejores”, declara Mahy Villanueva.
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